Hace un par de años junto con varios compañeros y en diferentes ámbitos laburo recuperando tanto las palabras como las imágenes que forman parte de las memorias de múltiples personas que por alguna u otras razones, se transforman en valiosas fuerzas y partes para construir Historia.
Hoy, en una tarde en que, con añoranza, evocaba algunos momentos de semanas que han pasado, pero me sacan una sonrisa, puse un disco, escuche un tema, Mundo agradable, y tuve el impulso de narrar algo que esta vez, forma parte del acervo de mis propias memorias...
estaba sentado frente a un equipo de música -como si solo él existiera, o como si nos invitara a ser espectadores de ese, su momento- cantando con algunas lagrimas que se deslizaban levemente por sus mejillas y una potencia en sus cuerdas vocales que me impactó.
ese movimiento de su cuerpo, ese simple gesto de cantar a los gritos una canción, me hicieron presentir, desde mis pocos añitos, que existía algo que se dejaba decir más allá de las palabras, más allá de Serú ...
ese instante me atrapó.
pasados los años supe qué me ocurrió, pude significar esa intuición infantil.
En esa tarde en que lo miré pude vislumbrar y comprender que no era solo la belleza del tema, de la composición; existía un valor agregado en cada una de esas palabras y acordes que formaban "Mundo agradable" ...
había en ese tema mucho de una lucha interna que mantenía hacía tiempo consigo mismo, aunque también, su increíble capacidad de enseñarme a atrapar lo pequeño, el detalle, lo común, para no perderme en los laberintos, o tal vez, para que si ocurría, nunca tomara los atajos. Siempre había que atravesarlo de lado a lado ...
Construimos un código común con ese disco, ¿recordas? ...hoy, gritando yo sola el tema, intuí que lo maravilloso que tiene lo eterno es justamente este detalle: que pasados 19 años la imagen y las sensaciones están intactas en mi memoria; al igual que el amor y nuestro último abrazo ...
[pd: esta es mi casa donde quiero estar, y volveré a abrir tu corazón, aunque me desintegre en la transformación. Yo canto para abrazarte, y, mi querido Francisco, nos veremos otra vez] un compendio de Serú 92 ..
Lagrima Luna